Qué no hacer en la mesa
Luis Arroyo Pérez, director de la Escuela de Etiqueta, como suele hacer en su libro, en sus clases, en conferencias, nos sermoneaba sobre cómo debemos comportarnos en un restaurante. Su formación y larga experiencia avalan estos conocimientos.
Si hay tantos errores es que lo estamos haciendo mal en el tema. Luis Arroyo Pérez, director de la Escuela de Etiqueta, nos ayudó a identificar las principales y extraerlas de su libro “La mesa está servidada”. Las reglas están casi obsoletas porque dejaron de enseñarse en casa y en las escuelas, pero los jóvenes están muy interesados en revivir ese conocimiento.
Móvil en el exterior
Estamos rodeados de aparatos electrónicos y es de mala educación centrar nuestra atención en ellos. Por eso es importante dejar el teléfono guardado o apagado y nunca sobre la mesa, así no caeremos en la tentación de mirar las redes sociales. Lo mismo ocurre con otros productos electrónicos como una televisión o alguna consola.
Se abren las servilletas y se colocan en el regazo cuando el resto de comensales están sentados y comienzan a comer. Solo se utiliza para limpiarnos la cara de restos de comida o cuando vamos a beber, para que no se ensucie el vaso.
Se colocan en la cabeza para que no se ensucie por si se cae algo cuando el comensal se lleva la comida a la boca. No se utilizan servilletas para limpiar la mesa o los vasos si se ensucian. Cuando hayamos terminado de comer, se deja la servilleta junto al plato, desplegada y por el lado menos manchado.
Si se dice mal la ganancia, ¿qué se dice?
Lo mejor que se le puede decir a la gente que comparte mesa con nosotros o nos ve comer es: ¡disfruta de tu comida! o buen apetito!
Es mejor decirlo antes de empezar a comer, porque no “sabe bien” obligar a la gente a reaccionar con la boca llena de comida.
¿Por qué es de mala educación poner el codo sobre la mesa?
Se considera de mala educación apoyar el codo sobre la mesa mientras se come por varios motivos. En primer lugar, es una señal de falta de respeto al anfitrión o anfitriona. En segundo lugar, se considera de mala educación ocupar más espacio del necesario. En tercer lugar, puede molestar a otros comensales. En cuarto lugar, los codos suelen estar sucios y pueden dejar marcas en el mantel. Finalmente, tener los codos sobre la mesa puede dificultar que los camareros y camareras te sirvan.
Lo que es grosero en la mesa
